Cemento Cola. ¿Plaste o masilla? - Bricopared | Beissier (2024)

Comenzaremos retirando muebles, apliques de baño e incluso, si es posible, la mampara de la ducha. Después, limpiaremos enérgicamente la superficie alicatada que pretendemos cubrir.

Con la superficie encolada, ya podemos comenzar a alicatar. Colocaremos el primer azulejo directamente sobre el listón que hemos fijado, tratando de no tocar la cola con los dedos. Una vez fijada esta primera baldosa, emplazamos una cruceta sobre uno de sus ángulos superiores y otra tumbada sobre el listón. Las crucetas garantizan que las juntas entre baldosas tengan siempre el mismo grosor. Procederemos de la misma manera hasta haber cubierto toda la superficie encolada.

A medida que nos aproximemos a los extremos de la pared, será necesario cortar los azulejos para encajarlos en los huecos restantes. También es posible que así como bajo la primera línea de baldosas que hemos colocado. Para ello, mediremos el hueco a cubrir y le descontaremos el grosor de la cruceta. Si la unión se produce con un paño que ya hemos alicatado, hemos de descontarle el grosor de dos crucetas, pues las baldosas que se encuentran en ángulo recto también deben presentar junta entre sí. Una vez tomadas las medidas, trasladaremos la pieza a la máquina de corte.

Ya sólo tienes que volver a colocar los muebles, los apliques y la mampara en su sitio y ¡listo!

Nuestros amigos de bricomanía nos muestran cómo pintar los azulejos del baño con Todo Terreno al Agua.

A continuación, nosotros te lo contamos paso a paso.

Limpia la superficie con un trapo para eliminar polvo, suciedad o restos de detergentes, grasa, etc. Este paso es muy importante, ya que una mala limpieza traerá como consecuencia problemas de adherencia de la pintura. Si encuentras manchas difíciles de quitar, prueba con Limpión de Beissier. ¡Hay pocas cosas que se le resistan!

Utiliza plásticos o papel de pintor, así como cinta de carrocero, para cubrir los muebles, el suelo y todas aquellas zonas que quieras proteger de goterones y brochazos accidentales.

Todo Terreno al agua es una pintra e impriación «todo en uno», por lo que no precisarás de imprimaciones previas. Simplemente abre el bote, remueve un poco su contenido y aplica directamente sobre la pared. Te recomendamos que empieces usando un pincel en las esquinas y otras zonas de difícil acceso y desupués utilices el rodillo en el resto de la pared.

Empapamos bien el cordón de silicona antiguo con un producto disolvente específico para siliconas. A continuación aclaramos la zona con agua, operación que ya se llevará buena parte de la silicona antigua. Los demás restos los retiraremos con la ayuda de una espátula, preferentemente metálica.

Limpiaremos la zona con la ayuda de un trapo. Es muy importante eliminar cualquier resto del disolvente de siliconas que haya podido quedar, pues este impediría que el nuevo cordón se adhiriera correctamente. Antes de aplicar la nueva silicona, las juntas deben estar limpias y secas.

Aplica un cordón de silicona generoso a lo largo de toda la junta. No te preocupes si queda irregular o si dejas demasiada silicona, en los próximos pasos lo arreglaremos.

Ya sólo tienes que pasar el dedo a lo largo de todo el cordón para llevarte contigo el sobrante de silicona y conseguir una junta de grosor regular. Pero ¡ojo! También aquí hay un pequeño truco. Si retiras el sobrante en una sola pasada, te encontrarás con que gran parte de la silicona acumulada termina en la parte final de la junta. En lugar de ello, lo que debes hacer es retirar el sobrante por tramos, es decir, pasar el dedo sobre 4 o 5 centímetros y, a continuación, limpiarte toda la silicona que te hayas llevado contigo en un pañuelo de papel. Así una y otra vez hasta el final de la junta.